Colores

En el celular hay listas de cosas pendientes para hacer. El nuevo método, para personas ansiosas como yo, es directamente grabar audios mientras vas manejando. Despues te auto escuchas dando ordenes e ideas a vos misma. Es algo raro ... pero efectivo.

Teñir con anilina. Ese era uno de los pendientes de aquellas listas. No es algo nuevo, ni un método innovador pero en el famoso cuarto guarda tutti o taller, había metros de lienzo de algodón y un tarrito color rosa para tintura en caliente y ... me tente.

No hubo una elección específica de marca de anilina ni método (existen anilinas para teñido en frio o en caliente). En el taller me había quedado de un trabajo, una anilina rosa para teñir cualquier tela incluidas las elásticas y lycra.

El proceso fue fácil. Jugué un poco con hilo atando el lienzo para generar alguna trama. Luego sumergí el lienzo en la cacelora donde había disuelto el polvo de la tintura en agua muy caliente. Lo deje reposar unos quince minutos y ... uuuaaalaa!!!

Tips a recordar para la proxima! Es MUY importante disolver muy bien las tinturas. En un pedacito del lienzo me quedaron unos puntitos mas oscuros de tintura concentrada.

Lo deje secar al aire libre y al rato tenia una hermosa tela teñida. Por ende... tenia un nuevo proyecto. Ayer la encontré, la corté y la transformé en un almohadón. Asi que ahora el proyecto se va a dormir conmigo todas las noches.

Escribiendo esto me acordé de una anécdota que involucra anilina y el arte de teñir. En este caso en particular el objeto a teñir era nuestra cabeza, en una bañera ajena que terminó de color verde, y mucha risa de por medio. Con mi amada amiga Mauge queriamos teñirnos el pelo de azul. Aún no entendemos muy bien por que nos quedó verde.

Anilinas, tinturas y colores. Lindo proyecto con un poco de magia ya que no sabes como va a quedar la trama hasta que estiras la tela.

Lindo jueves de viento y fresquito.

Sopa